Seguimos con nuestras reviews para que conozcas la mayor cantidad de periféricos gaming posibles, antes de las Navidades. Hoy te traemos la review del Razer Blackwidow Chroma, un teclado mecánico muy parecido a otras versiones que ya hemos analizado para ti en NewEsc, y que vamos a conocer en detalle a continuación.
Razer Blackwidow Chroma: diseño
Hablar del diseño del Razer Blackwidow Chroma es hablar del de sus parientes, como el Blackwidow Ultimate 2014, que es tremendamente parecido.
Se trata de un teclado mecánico, con unas dimensiones no muy exageradas. Su chasis es de plástico negro con un acabado casi metálico, y cuyo marco superior cubre completamente la base de las teclas (o sea, la base de ellas no sobresale por encima del marco).
Esto hace que no se aprecien los reflejos de colores que podíamos ver por ejemplo en el Razer Blackwidow X Chroma, pero no significa que la apariencia de este teclado no sea fabulosa.
El teclado cuenta con 5 teclas directas para macros en el lateral izquierdo, algo especialmente cómodo (además de para algunos juegos) para cambiar rápidamente entre perfiles de iluminación por ejemplo.
La fila de teclas superior cuenta con funciones alternativas, como son la grabación de macros, la tecla de modo juego que bloquea algunas pulsaciones para evitar que salgamos de un juego por error, o las teclas multimedia. Se accede a esas funciones pulsando “Fn” y la tecla correspondiente.
El Razer Blackwidow Chroma cuenta con 5 teclas directas para macros en el lateral izquierdo, muy cómodo al no tener que pulsar varias teclas para acceder a ellas.
La iluminación del teclado, como ocurre con toda la serie Chroma, es RGB de 16,8 millones de colores para cada tecla, con posibilidad de personalización con distintos efectos de luces. El tono mate de la iluminación a través del plástico de las teclas es perfecto, ni muy apagado ni muy brillante.
Sí que nos ha gustado un poco menos la iluminación del indicador del modo juego y del indicador de la grabación de macros, que son bastante difusos y poco definidos, desde luego no a la altura del resto de iluminación del teclado.
En cuanto a sus dimensiones exactas y peso, el teclado mide 475 mm x 171 mm x 39 mm, y tiene un peso de 1,5 kg aproximadamente, por lo que no es un dispositivo ligero.
Revisando sus laterales encontramos además el cable USB trenzado de muy buena calidad, que termina en dos puertos USB, ya que el Razer Blackwidow Chroma incorpora además un puerto USB para mayor comodidad. Y, por si fuera poco, en el lateral derecho también nos ofrece dos conectores de audio con jack 3,5mm (uno para auriculares y otro para micrófono), que tendremos siempre al alcance de la mano. 
Esos conectores también llegan al final del cable USB para que puedas conectarlos a tu equipo.
Encontramos además un puerto USB y dos conectores de audio en el propio teclado, que ponen la conectividad al alcance de nuestra mano.
Funcionalidad
Llega la hora de hablar sobre qué tal funciona el Razer Blackwidow Chroma. Lo cierto es que, tras varios días de uso intensivo, no podemos decir nada malo de él.
Como quizá ya sepas, Razer ha diseñado sus propios switches para algunos de sus teclados (como éste), y lo cierto es que la respuesta es muy buena.
Nosotros hemos probado la versión con switches verdes (Razer Greens), inspirados en los Cherry MX Blue, con una presión de actuación de 50 gramos, y cuyo punto de actuación está un poco más alto que en el caso de los Cherry (o sea, un poco más cerca de la posición de reposo de la tecla).
Los switches Razer Greens están inspirados en los Cherry MX Blue, y su respuesta es genial, con una presión de actuación de 50 gramos y un punto de actuación un poco más alto que en los Cherry.
Esto hace que sea muy cómodo a la hora de jugar, ya que hacer dobles pulsaciones de una tecla es más rápido, al tener que hacer menos recorrido para ello. Y, por otra parte, no hace incómodo escribir (como pasaba por ejemplo en el caso del Corsair K70 Rapidfire, en el que muy fácilmente presionábamos teclas sin querer por lo sensible que eran y su poco recorrido).
Hay que destacar además que este teclado cuenta con teclas macro dedicadas, en el lateral izquierdo, lo cual es de agradecer para no tener que acceder a ellas pulsando combinaciones de teclas.
Como siempre suele ocurrir, este teclado no cuenta con detector de manos, que pueda encender la iluminación automáticamente al acercarlas. Tampoco nos incluye un reposamuñecas, aspecto que sería de agradecer.
En resumen, nos encontramos ante un teclado muy cómodo y con una respuesta excelente, un poco ruidoso (como casi siempre ocurre con los teclados mecánicos) pero sencillo de utilizar.
Software
Como siempre comentamos en esta gama de productos, no se puede concebir un dispositivo Chroma sin el software Synapse, centro neurálgico del control y configuración de los mismos.
En este caso, Synapse nos permite configurar a nuestro gusto la iluminación del teclado creando distintos perfiles con diferentes efectos y colores, además de configurar el modo juego o gestionar nuestras macros, todo de una manera bastante intuitiva.
No dejes de probar las aplicaciones Chroma, especialmente juegos que toman el control de la iluminación de tus dispositivos Chroma para adaptarla a la acción (el caso de Overwatch es uno de los que más satisfacciones nos ha dado).
Packaging
El packaging del Razer Blackwidow Chroma es muy similar al del resto de su familia. Se trata de una caja oscura con la imagen del teclado en portada, y un hueco donde están los cursores para que quien lo vaya a comprar en una tienda pueda probar el tacto y respuesta de las teclas (esta idea nos parece genial).
Nos parece una idea original y práctica que Razer deje al descubierto varias teclas del teclado para que, en tiendas, podamos probar su respuesta en persona.
Por supuesto, encontramos elementos “verde Razer” en la caja, además de todas sus características detalladas, y un esquema de la estructura de las teclas y switches para que conozcamos cómo funciona.
En el interior de la caja tenemos el teclado perfectamente protegido por una cubierta de plástico, y bajo él un sobre negro con una nota de agradecimiento, un manual de información básica y las pegatinas Razer que tanto nos gustan.
En cualquier caso, uno no puede hacerse una idea de lo genial de la iluminación de esta familia Chroma hasta que lo ve con sus propios ojos, por lo que las fotos de la caja no ayudan demasiado, aunque no se puede hacer mucho más en ese sentido.
Resumen
El Razer Blackwidow Chroma viene a completar esta familia de teclados uniendo puntos positivos de varios modelos. Una iluminación RGB totalmente personalizable, teclas macro dedicadas, puerto USB y conectores de audio extras… Sin duda se trata de un teclado más que recomendable si estás pensando en sustituir el tuyo.
Nos ha gustado especialmente la respuesta de sus switches, y que su nivel de ruido no sea demasiado alto comparado con otros teclados mecánicos. Puede que prefiramos el cuerpo metálico y las teclas con mayor elevación de su hermano el Blackwidow X Chroma, pero sin duda las teclas macro son una ventaja que encantará a más de un gamer.
El precio del Razer Blackwidow Chroma ronda los 175€, por lo que desde luego no se trata de un teclado barato. Pero, como suele ocurrir en esta gama, estamos hablando de un dispositivo que te dará años de servicio, y que aguantará tus partidas más intensas sin inmutarse. Un compañero que estará a tu altura en todo momento.
Si lo deseas puedes ver nuestra guía de compra de los mejores teclados mecánicos baratos para jugar, trabajar y escribir.
