Una de las casas más reputadas del panorama informático es GIGABYTE, con muchos años años en el sector. Dentro de GIGABYTE encontramos que tienen su línea gaming AORUS más arriesgada en cuanto diseño y capacidades, pero no por ello han dejado de lado su marca principal.
Es por ello que GIGABYTE cuenta con una amplia linea de productos informáticos con los que satisfacer todas las necesidades de los usuarios. Hoy tenemos la suerte de analizar el chipset tope de gama de NVIDIA instalado en la GIGABYTE RTX 2080 TI GAMING OC 11G.
La tarjeta nos llega en una caja negra con logotipo en gris marca de GIGABYTE en el frontal de la misma, con ese ojo robótico característico de la marca. Por detrás encontraremos las características de la tarjeta, así como capacidades de los componentes usados en la misma.
Especificaciones Técnicas
Arquitectura | Turing |
GPU | 4352 CUDA Cores 544 Tensor Cores 68 RT Cores 68 SMs / 272 TUs / 88 ROPS |
Chipset | NVIDIA TU102-300A-K1-A1 (12 nm FFN) |
Ancho de banda | 616 GB/s |
Memoria | 11GB GDDR6, 14 Gbps |
Ancho de banda | 352-bit |
Conexiones | DisplayPort 1.4 x 3 / HDMI 2.0b x 1 / USB Type-C x 1 |
Reloj core | Normal: 1350 MHz Boost: 1650 / 1665 MHz |
TDP | 300 W |
Alimentación | 8-pin x 2 |
Dimensiones | 286,5 x 114,5 x 50,2 mm |
Diseño y construcción
Estamos ante una tarjeta con un peso de 1.200 gramos y con una configuración de triple ventilador. El diseño sigue la línea de lo antes visto en GIGABYTE, siendo sobrio y bastante simple. La tarjeta gráfica cuenta con unas dimensiones de 286,5 x 114,5 x 50,2 mm ocupando 2 slots de espacio en el equipo.
La carcasa protectora del radiador esta por completo diseñada en negro cubriendo un disipador de aluminio con heatpipes en color cobre. Los 3 ventiladores están atornillados al radiador siendo todos del mismo tamaño unos 82mm.
Si echamos un vistazo a su backplate observamos que esta construido en aluminio en color negro con relieves y el logotipo de GIGABYTE en color blanco en su zona central.
Conexiones
Si examinamos su slot bracket, observamos que dispone de 3 puertos DisplayPort 1.4 que permiten una salida de video 8k a 60hz. Contaremos también con 1 salidas HDMI 2.0b para 4k a 60hz y un puerto USB Type-C. Dicho puerto es compatible con VirtualLink permitiéndonos conectar gafas de realidad virtual. Aunque tendremos la siguiente limitación.
También encontramos el puerto de conexión NVlink x8 de doble canal con un ancho de banda de 100 GB/s bidireccional permitiéndonos configurar un SLI 2-way con otra tarjeta. Y por último los conectores de corriente, compuestos por dos PCI Express de 8 pines que suministrarán a la tarjeta 300w de tdp.
Para poder alimentar un equipo con esta tarjeta necesitareis de una fuente de alimentación de al menos 750W. Esto no significa que la tarjeta vaya a consumir esos vatios, pero es la recomendación del fabricante, más adelante lo comprobaremos en las pruebas. Toda esta potencia suministrada a la GPU y las memorias estará controlada por un potente VRM de 13+3 fases y con un limite de energía de un 111% por BIOS.
Construcción
Para la ventilación GIGABYTE ha escogido su sistema WINDFORCE Stack de 3 ventiladores de 82 mm e iluminación RGB en el extremo de las aspas, un detalle llamativo y original. Existe una diferencia de tamaño en las aspas del ventilador central y debido a su tamaño se encuentra a una altura distinta de los ventiladores extremos. Estos están instalados en un triple radiador de aluminio que cuenta con 7 heatpipes de cobre para transmitir el calor desde su base de cobre niquelada.
El radiador cuenta con unas bases para otorgar mayor superficie y contactar mediante thermalpads con la GPU, las memorias y los mosfets. Todo ello en pos de favorecer una mayor disipación de los componentes importantes en el PCB.
El backplate construido en aluminio negro anodizado solo ayudara a mantener la rigidez del PCB puesto que no dispone de thermalpads.
Rendimiento
El chipset corresponde al NVIDIA TU102-300A-K1-A1 (12 nm FFN), compuesto de 4352 núcleos CUDA , 544 núcleos Tensor, núcleos 68 RT y por supuesto las ya más que conocidas tecnologías Raytracing y DLSS. El reloj del núcleo funciona a una base de 1.350 mhz alcanzando un boost de 1.665 mhz gracias a su modo OC. Estamos hablando de un incremento frente a los 1.635 mhz del modelo de referencia de 30 mhz. Estas velocidades se adaptan en función de la temperatura y la carga de trabajo. En las pruebas de stock llegamos a alcanzar los 1.950 mhz sin problemas.
En cuanto a las memorias, NVIDIA ha decidido usar las GDDR6, ampliando su ancho de banda. Ahora dispondremos de 11 GB de memoria GDDR6, con un ancho de banda de 616 GB/s y un bus de 352 bits. Con los 11 GB tendremos más que de sobra para jugar a todos los títulos en cualquier resolución.
Equipo de pruebas
Vamos a pasar a las pruebas, para ello contamos con el siguiente equipo:
- Procesador: Intel I9 9900KF
Refrigeración líquida: Corsair H100i RGB Platinum
Placa base: ASRock Z390 Phantom Gaming X
Memorias: G. Skill Tridentz 16 gb DDR4 a 3.866 mhz
Almacenamiento: Kingston A400 480 Gb
Fuente de alimentación: Corsair RM850
Para realizarlas hemos utilizado sus últimos drivers 441.20 que portaran las últimas mejoras en rendimiento para los juegos actuales, por lo que puede haber diferencias de rendimiento con comparaciones previas. Como monitor hemos usado un AORUS CV27Q 27@ QHD reescalando la imagen a 2160p para las pruebas a 4k.
La Gaming OC se muestra solvente en todas las resoluciones, claramente posee el chipset actual más potente del mercado.
3DMark
Juegos
Temperatura, consumo y ruido
Ruido y temperatura
En las pruebas realizadas a una temperatura ambiente de 20 grados hemos obtenido una temperatura máxima de 68 grados con un 53% de funcionamiento.
Sobre el ruido generado por los ventiladores, es posible pensar que por su forma menos llamativa que su hermana AORUS RTX 2080 TI XTREME vayamos a tener una mayor sonoridad, pero estaremos equivocados. La ventilación es perfecta y su sonoridad es casi nula.
Eso en cuanto a ventiladores, porque en cuanto a ruido eléctrico no hemos tenido tanta suerte. La unidad que hemos recibido es audible a una distancia de más de un metro y realmente es muy molesto.
Overclock
El límite de potencia limita a la hora de exprimir algunos mhz más a la GPU y su estabilidad en dicha frecuencia. Pero con la actual configuración y sistema de disipación no tendréis problemas en alcanzar los 2.000/2050 Mhz solo tocando opciones como power limit y los frecuencia objetivo de la GPU.
Software
Un software muy básico, demasiado. Me esperaba más opciones por el nivel alto de diseño que ya tiene la tarjeta de por sí. Podréis configurar los aspectos básicos de funcionamiento de la GPU, memorias, ventiladores, etc.
Veredicto y alternativas
La Gaming OC dispone del mejor chipset posible para juegos, junto con tecnologías como Ray Tracing y DLSS que mejoran bastante la experiencia visual.
Tenemos una tarjeta gráfica pensada para obtener los mejores rendimientos posibles en cualquier resolución, ya sea FHD, 2K o 4K, que es para la que realmente está pensada. Sin duda podréis disfrutar de una alta tasa de FPS en resoluciones 2K y FHD, mientras que en 4K podréis superar los 60 FPS. Aunque he de advertirles, DLSS no funcionará por debajo de 4K.
El funcionamiento de sus ventiladores donde el central gira en sentido inverso a los dos extremos evita generar turbulencias y con ello disminuir el ruido. Si bien nos encontramos con un funcionamiento de los mismos superior al 50% sigue siendo silenciosa en ese aspecto al menos. Otro cantar es el ruido eléctrico que adolece la tarjeta, muy molesto, incluso en una torre cerrada.
Con un precio en tienda de 1.239,07 euros tenemos alternativas que por un poco más nos dará mejor resultado en cuanto a sonoridad, mejorando en temperaturas y algo más podremos rascar en mhz. Por 1.319,90 euros tenemos la AORUS GeForce RTX 2080 Ti 11G o la MSI GeForce RTX 2080Ti Gaming X Trio 11 GB por 1.314,90 euros. Por dicho margen de precio no dudaría y tiendo a pensar que el elevado precio de la Gaming OC se debe a su alta demanda por el precio original.